Bendiciones espirituales

Efesios 1:1-13

Según los escritos del libro de Hechos, Pablo visitó Éfeso en uno de sus viajes (Hechos 19) y como resultado, llegó a existir una iglesia del Señor en esa ciudad. Ya escribiéndole desde Roma y les hace ver a los hermanos las bendiciones conseguidas por haber obedecido a Cristo.
(1) El escogimiento (ser escogidos) Efesios 1:3: De acuerdo a las escrituras del Antiguo Testamento, solo un pueblo gozó de este privilegio a saber, Israel (Deuteronomio 7:6,7). Israel perdió esta bendición al rechazar al Hijo de Dios (Hechos 3:22-24) y ahora los escogidos, el Israel espiritual, somos nosotros (1 Pedro 2:7-10; Col. 3:12-15).
(2) La adopción (ser adoptados) Efesios 1:5. Una de las más tristes noticias entre nosotros es ver tantos huérfanos. Andan de aquí allá, expuestos a todo: falta de alimento, ropa, educación, disciplina, etc. Necesitan urgentemente un hogar que les dé el calor de padre que han perdido.
El hombre sin Dios es así. Anda de aquí allá enredado en cosas ilícitas, vicios y pecados. Es acá donde Dios interviene adoptándonos y dándonos sus cuidados.
(3) La redención (ser redimidos) Efesios 1:7. Dios al ver la condición nuestra, en pecado, bajo pecado y controlado por el pecado, nos redimió. ¡Ahora somos libres! (Col. 1:13,14)
(4) Tenemos herencia Efesios 1:11. ¿A cuántos de los lectores les gustaría recibir una herencia?
Dios, mirando el futuro, sabía algunas personas iban a obedecer y proveyó los medios para hacernos sus herederos (1 Pedro 1:3,4).
(5) Nos selló Efesios 1:13. ¿Qué es un sello? Es una marca de identificación. ¿A quién pertenece el objeto? Ser sellados indica que somos posesión suya. El tiene el título de propiedad suyo y mío y mientras el sello permanezca en nosotros, está asegurada nuestra salvación.
Aunque Dios en su misericordia derrama muchas bendiciones materiales sobre su creación: sol, agua, oxígeno, alimento, etcétera, las bendiciones espirituales mencionadas en Efesios 1 son solo para los que le han obedecido.
Escribe Luis Darío Segovia