ESPÍRITU SANTO
Contestaciones a cuatro preguntas acerca del…
* ¿Quién es el Espíritu Santo?
* ¿Cómo El Espíritu Obra?
* ¿Cómo el Espíritu se ha manifestado?
*¿Cómo El Espíritu mora en nosotros?
1. ¿QUIEN ES EL ESPÍRITU SANTO?
Los russellistas («testigos de Jehová») dicen que el Espíritu no es un ser personal, sino la fuerza, o sea, el aliento de Dios. Pero hay dos puntos que indican que es un Ser personal que razona y tiene sentidos igual que el Padre y el Hijo.
(1) Es mencionado en un plano de igualdad con el Padre y el Hijo. En Mateo 28:19 Jesús enseñó a los apóstoles que bautizaran, «en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo». ¿El Padre y el Hijo son Seres personales que aman, piensan y razonan? ¡Sí! Entonces, el Espíritu también es un Ser personal ya que es mencionado en un pie de igualdad con Ellos.
Se puede hacer el mismo punto con referencia a II Corintios 13:14 donde Pablo dice, «La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros».
(2) Tiene los atributos de un ser personal:
* Oye, habla, hace saber, etc. Juan 16:13, 14 dice, «…os guiará a toda la verdad, porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oiga; y os hará saber lo que habrá de venir». ¿Una «fuerza impersonal» es capaz para hablar, oír y hacer saber?
* Habla y envía a otros. (Hechos 13:2)
* Tiene sentidos. (Hechos 15:28)
* Siente tristeza. (Efesios 4:30)
* Ama. (Romanos 15:30)
Hay otros textos que revelan cualidades personales del Espíritu que indican que es un Ser personal.
TIENE ATRIBUTOS DIVINOS (ES DIOS)
Aparte del hecho que es mencionado en pie de igualdad con el Padre y el Hijo (Mateo 28:19; II Cor. 13:14), una comparación de textos indica que el Espíritu es divino, es decir, tiene los atributos de Dios.
* Hechos 5:3 nos dice que Ananías mintió al Espíritu. Pero luego, en versículo 4 dijo Pedro a Ananías, «No has mentido a los hombres sino a Dios». ¡Es lo mismo! Mentir al Espíritu es mentir a Dios porque el Espíritu Santo es Divino, es decir, tiene los atributos de Dios.
* En Isaías 6:8,9 el profeta dijo, «oí la voz del Señor que decía…ve, y di a este pueblo: ‘Escuchad bien, pero no entendáis; mirad bien, pero no comprendáis…'» ¿Quién lo dijo según Isaías? ¡Fue el Señor Dios!
En Hechos 28:25-27 Pablo cita Isaías 6:8,9, pero note usted quién dio esta profecía según Pablo. «Bien habló el Espíritu Santo a vuestros padres por medio de Isaías el profeta, diciendo: ve a este pueblo y di…» Según Isaías fue Dios que habló de la dureza de los judíos y según Pablo fue el Espíritu Santo. Pero no hay contradicción ¡porque el Espíritu Santo es divino, es Dios!
* Hebreos 10:15-17 es una cita de Jeremías 31:33, la profecía acerca del nuevo pacto que Dios iba a hacer con su pueblo. Según Jeremías, fue el SEÑOR (Jehová) que declaró este pacto. Según el escritor de Hebreos fue el Espíritu Santo quién dio la declaración. Pero no hay contradicción porque el Espíritu Santo tiene los atributos de Dios, es Dios.
Vemos de los textos analizados que el Espíritu es un Ser personal mencionado en pie de igualdad con el Padre y el Hijo. Tiene los atributos de personalidad y es divino.
2. ¿COMO EL ESPÍRITU SANTO OBRA?
La Biblia nos dice que el Espíritu Santo convence al pecador, guía al cristiano, le lava, le santifica, etc. Pero, ¿cómo lo hace?
La mayor parte de los religiosos, automáticamente asumen que el Espíritu hace su obra en forma milagrosa y misteriosa. Por tanto al hablar de la obra del Espíritu, hablan mucho de sueños, visiones, sentimientos y otras formas subjetivas del emocionalismo. Pero, cuando uno analiza la Biblia, se da cuenta que el Espíritu opera en una forma más sencilla y segura.
LA CONTESTACIÓN SENCILLA
La Biblia enseña que el Espíritu Santo llama, convence, convierte, santifica y guía solamente a través de Su espada, la palabra de Dios.
Efesios 6:17 dice, «tomad también…la espada del Espíritu que es la palabra de Dios».
El Espíritu tiene una espada y es por medio de ella que obra hoy en día.
La contestación breve a las preguntas, ¿cómo el Espíritu nos guía? ¿cómo convence al pecador? ¿cómo nos santifica? ¿cómo nos lava? etc. siempre es la misma: por medio de Su espada, la palabra de Dios.
LA VERDAD ILUSTRADA
La Biblia dice que el Espíritu trae muchas bendiciones al cristiano y algunos textos nos especifican como lo hace: por medio de su palabra.
Por ejemplo, fíjese en los siguientes paralelos:
(1) Nacemos de nuevo del Espíritu (Juan 3:5- 8).
Nacemos de nuevo de la palabra(I Pedro 1:23-25)
(2) Somos lavados por el Espíritu (I Cor. 6:11).
Somos lavados por la palabra (Ef. 5:26).
(3) Somos santificados por el Espíritu (I Cor. 6:11).
Somos santificados por la palabra (Juan 17:17).
EL ESPÍRITU NOS CONVIERTE
POR MEDIO DEL EVANGELIO (LA PALABRA)
* «En Cristo Jesús os engendré por medio del evangelio» (I Cor. 4:15).
* «…El os llamó mediante nuestro evangelio…» (II Tes. 2:13,14).
* «El nos hizo nacer por la palabra de verdad…»(Sant. 1:18).
* «La fe viene por el oír, y el oír por la palabra de Dios». (Romanos 10:17) La fe, condición para la salvación, no viene por medio de visiones sino por oír la palabra de Dios.
En todos los casos de conversión en la Biblia, los nuevos cristianos fueron convencidos y convertidos a través de la predicación de la palabra. Analice para si mismo los casos en el libro de Hechos de la gente en el día de Pentecostés (capítulo 2), los samaritanos (cap. 8), el eunuco (8), Saulo de Tarso (9), Cornelio (10) Lidia (16) y el carcelero (16). El Espíritu obró en ellos por medio de la predicación del evangelio. Así convence al pecador hoy en día.
EL ESPÍRITU NOS GUÍA
SOLAMENTE A TRAVÉS DE LA PALABRA
* Juan 16:13 nos dice que el Espíritu iba a guiar a los apóstoles a «toda la verdad». No les iba a guiar a una parte de ella y dejar porciones para ser reveladas en el futuro a través de la iglesia romana, profetas modernos o nuevas revelaciones. Les iba a guiar a 100% de ella! Los apóstoles y profetas del primer siglo escribieron esta verdad y ella fue recolectada en el Nuevo Testamento. Al tener la doctrina escrita por los apóstoles y profetas, por tanto, tenemos toda la verdad. Si los apóstoles no tuvieron alguna supuesta «verdad», no es de Dios ya que Jesús prometió a los apóstoles que ellos la iban a recibir toda.
* II Timoteo 3:16, 17 nos dice que con escrituras inspiradas podemos ser «perfectos, enteramente preparado para toda buena obra». No necesitamos más que escrituras inspiradas.
* Judas 3 nos enseña que «la fe» (el sistema del cristianismo) fue revelada una sola vez. Los que piensan que el proceso de revelación del Espíritu Santo acerca de la fe cristiana ha sido un proceso continuo a través de los siglos pasan por alto este texto y contribuyen a la confusión que proviene al aceptar otras autoridades (como el catecismo, libro de mormón, escritos de Elena White, profetas modernos del pentecostalismo, etc.) en adición a las escrituras.
Evitemos el hablar de nuestros sentimientos o impulsos como si por medio de ellos el Espíritu nos guiara. Tal concepto produce la confusión y contradicción que vemos en el mundo sectario. Confiemos en la palabra de Dios, la espada del Espíritu, porque es suficiente para hacer Su trabajo.
(3) LAS TRES MANIFESTACIONES DEL ESPÍRITU SANTO
El Nuevo Testamento revela tres formas distintas en las cuales el Espíritu se ha manifestado entre los hombres: (1) El bautismo en el Espíritu (2) los dones milagrosos y (3) la morada en los cristianos. Mucha confusión religiosa procede del hecho que algunos no ven la diferencia entre estas manifestaciones.
A veces la terminología del Nuevo Testamento es parecida al hacer referencias a diferentes manifestaciones, pero el contexto siempre especifica cuál es la que los escritores inspirados tuvieron en mente.
Vamos a notar algunas características particulares y distintas de estas tres manifestaciones Analice el gráfico y también la explicación.
EL BAUTISMO CON EL ESPÍRITU SANTO
En el Nuevo Testamento, la palabra «bautismo» significa «sumergirse» y es una palabra empleada para describir la manifestación del Espíritu a los apóstoles y a Cornelio y su familia. Nótese algunas cualidades del bautismo con el Espíritu Santo las cuales lo distinguen de otras manifestaciones del Espíritu:
* Fue prometido solamente a los apóstoles: (Lucas 24:49, Juan 16:13 y Hechos 1:5) y fue dado a ellos en el día de Pentecostés (Hechos 2:1-8;14).
Cornelio y su familia, los primeros cristianos que no eran judíos, también recibieron el bautismo con el Espíritu Santo (Hechos 10:44-48; 11:15,16) como señal que Dios había aceptado a los gentiles.
* Vino directamente del cielo. (Hech. 2:2-4; 10:44) No tuvieron que buscarlo o «rogarlo» porque vino repentinamente del cielo.
* Fue administrado por Cristo (Juan 1:33; Mateo 3:11). Los hombres no tuvieron nada que ver con él.
* El Espíritu los controlaba. Hechos 2:4 dice, «…comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen». Los apóstoles no controlaban sus palabras porque el Espíritu lo hizo todo.
* El bautismo fue para inspirar a los apóstoles. (Juan 16:13; Mar. 16:20; Heb. 2:3,4).
* Terminó antes del año 64 después de J.C. El bautismo con el Espíritu Santo fue un evento único. Pasó dos veces en la historia: en el día de Pentecostés y la conversión del primer gentil, Cornelio. En Efesios 4:5, escrito alrededor del año 64 D.C., Pablo escribió que hay, «un bautismo». Este bautismo habría sido el bautismo con agua ya que el bautismo en agua fue dado como una parte de la gran comisión la cual iba a estar en vigencia «hasta el fin del mundo» (Mateo 28:19,20). (Recuerde que cuando la Biblia manda el bautismo, tiene que estar hablando del bautismo en agua porque el bautismo con el Espíritu no fue mandamiento, sino promesa.)
Todo esto significa que al llegar el año 64, cuando Pablo habría escrito el libro de Efesios, el bautismo con el Espíritu Santo ya habría servido su propósito y que en aquel tiempo solamente quedó un bautismo, el con agua.
LOS DONES MILAGROSOS DEL ESPÍRITU
Los dones milagrosos fueron dados a los que recibieron la imposición de las manos de los apóstoles para confirmar las revelaciones y profecías que les fueron dadas al no tener la revelación de Dios en forma escrita.
Hechos 8:18 dice claramente que fueron dados a través de la imposición de manos de los apóstoles. Felipe, no siendo apóstol, no pudo dar los dones a los samaritanos, sino tuvieron que enviar a Pedro y a Juan de Jerusalén para dar los milagros a otros. Timoteo recibió su don a través de la imposición de las manos de Pablo (II Tim. 1:6)
Nótese que los dones milagrosos se distinguieron en varios aspectos del bautismo con el Espíritu Santo.
(1) Este vino directamente del cielo. Ese fue dado por la imposición de manos de los apóstoles.
(2) Este fue administrado por Cristo (Juan 1:33). Ese por los apóstoles (Hechos 8:18; II Tim. 1:6, Rom. 1:11).
(3) El Espíritu controlaba las lenguas habladas cuando los apóstoles fueron bautizados con el Espíritu Santo. (Hechos 2:4 dice, «según el Espíritu daba que hablasen».) Las lenguas habladas por los que tenían dones milagrosos debían ser controladas por ellos mismos (I Cor. 14:26-33).
(4) El bautismo en el Espíritu Santo fue para inspirar a los apóstoles (Juan 16:13; Marcos 16:20). Los dones eran para el servicio de la iglesia primitiva al no tener ellos la revelación completa de Dios. Muchos que tenían dones no eran «inspirados» (I Cor. 12:1-10; 13,14).
En fin, es un error confundir el bautismo en el Espíritu con los dones milagrosos. Aunque tuvieron algunas cosas en común (más que nada las lenguas) fueron dos manifestaciones distintas para diferentes circunstancias.
Los dones milagrosos habrían terminado al morir los apóstoles y los que recibieron la imposición de manos de ellos, porque solamente ésos pudieron transmitir los dones
a otros (Hechos 8:18). I Corintios 13:8-13 dice que los dones iban a terminar con la venida de la revelación completa.
(c) La morada del Espíritu en el cristiano: Mas información en la última sección.
Conclusión a esta sección: Reconocer estas tres manifestaciones distintas y sus propósitos particulares nos ayudará a evitar mucha confusión. En el próximo artículo de esta serie analizaremos la pregunta, ¿Cómo el Espíritu Santo mora en nosotros?
4. ¿COMO EL ESPÍRITU MORA EN EL CRISTIANO?
La Biblia enseña claramente que el Espíritu mora en todos los cristianos (Hechos 5:32; Romanos 5:5; 8:9, etc.). Los siguientes puntos distinguen la morada del Espíritu Santo del bautismo y los dones milagros de El.
(a) El Espíritu Santo mora en todos los cristianos (Hechos 5:32; Tito 3:5).
(b) Comienza a morar en el hombre cuando llega a ser cristiano (Hechos 5:32). El espíritu del mundo ya no mora en él sino el Espíritu de Dios.
(c La morada del Espíritu Santo no tiene nada que ver con milagrosos. Juan el Bautista estaba lleno del Espíritu (Lucas 1:15) pero no hizo ningún milagro (Juan 10:41).
En contraste con el bautismo del Espíritu y los dones milagrosos, El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo moran en los cristianos mientras hay salvación.
Pero ¿en qué sentido El Espíritu mora en nosotros? Algunos piensan en una presencia misteriosa que se apodera de nuestros cuerpos, como si fuera algún fantasma que entrara en nuestra carne y huesos. Están equivocados.
EL PADRE Y CRISTO TAMBIÉN MORAN EN NOSOTROS
Los que especulan en una forma no sana sobre la morada del Espíritu en nosotros hablan poco del hecho que el Padre y el Hijo también moran en nosotros (Col. 1:27; II Cor. 6:16; Ef. 3:17; Gal. 4:19; etc.). En Juan 17:20-23 leemos lo siguiente:
* El Padre mora en Cristo (vs. 21).
* Cristo mora en el Padre (vs. 21).
* Nosotros moramos en ellos (vs. 21).
* Cristo mora en nosotros (vs. 23).
Nótese que no solamente moran ellos en nosotros, ¡nosotros moramos en ellos (Juan 17:21; I Juan 2:24,26,27; 3:6; 4:15,16)!
¿Qué significan las expresiones en el Nuevo Testamento de morar unos en otros? La contestación nos ayudará con la pregunta que forma el título de este artículo.
LA PALABRA «EN»
El lexicógrafo Thayer en la página 211 de su léxico dice que la palabra «en» puede ser empleada con referencia a, «una persona a quien otro es plenamente ligado y bajo cuyo poder e influencia es sujeto, de tal manera que ése puede ser caracterizado como el lugar donde éste mora y mueve».
Comprendiendo este uso de la palabra «en» y el concepto de morar uno en otro, podemos ver que si estamos «plenamente ligados» al Padre, Hijo y también al Espíritu Santo, y si estamos completamente sujetos a Su poder e influencia, se puede decir de nosotros» «El Padre mora en El», o, «Cristo mora en El» o, «El Espíritu Santo mora en El». Sencillamente quiere decir que hay plena comunión, una relación íntima entre nosotros y la Deidad, y por tanto «Dios mora en nosotros».
Esta forma de hablar en el griego se emplea también en nuestros idiomas. Por ejemplo:
* Del fanático de béisbol se dice, «El tiene el béisbol en la sangre».
* Del músico decimos, «El tiene la música en los huesos».
* Del individuo que imita a algún individuo famoso como Pele o Gandhi decimos, «Veo a Pele en él», o, «veo a Gandhi en él».
Estas expresiones no implican nada de brujería o de magia, sino solamente indican lo que domina la vida de los individuos.
Y así significa la expresión, «El Espíritu en nosotros». Al llenarnos con la palabra revelada por el Espíritu y al sujetarnos a El, se dice de nosotros que «el Espíritu mora en nosotros. Al llegar a ser cristianos, ya no vivimos bajo el dominio de Satanás, porque Dios nos ha dado el Espíritu Santo quién nos influye de otra forma.
No es difícil ver que el Espíritu (tanto como el Padre y el Hijo) mora en nosotros en este sentido de dominar nuestra vida a través de Su influencia. Si mora en nosotros en otro sentido, la Biblia no da enseñanza clara respecto a ello.
¿COMO SABEMOS QUE EL ESPÍRITU MORA EN NOSOTROS?
Creo que hay dos formas bíblicas para saber tener el Espíritu morando en nosotros, o sea, dominando nuestras vidas:
(1) Por la fe. ¿Cómo sabemos que Cristo mora en nosotros? Ef. 3:17 dice que es por la fe.
Así sabemos que el Espíritu mora en nosotros: Sencillamente al leer la promesa en la Biblia y creerla. Sé que este principio es demasiado sencillo para quienes buscan relámpagos y truenos pero tales personas, al no estar contentas con la palabra, demuestran su falta de madurez espiritual.
(2) Por los frutos del Espíritu. Gálatas 5:22,23 nos habla de los frutos del Espíritu: amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y templanza. Al demostrar estas cualidades en la vida, mostramos la morada del Espíritu en nosotros. Es El que nos manda a través de Su espada.
CONCLUSIÓN
Demostramos nuestro aprecio por la obra del Espíritu cuando nos dedicamos a obedecer la palabra revelada por El así glorificando a Cristo a quien El también quiere glorificar. Quien ignora la palabra o la tiene en poco, desprecia al Espíritu.
RESUMEN DEL TRATADO
En esta serie hemos contestado cuatro preguntas con textos bíblicos.
(1) ¿Quién es el Espíritu Santo? Es un Ser personal quien oye y habla, tiene sentidos, siente tristeza, ama y tiene mente. Es divino, es decir, tiene los atributos de Dios.
2) ¿Cómo obra? Obra a través de Su espada, la palabra de Dios (Ef. 6:17)
(3) ¿Cuáles son las tres manifestaciones de El? (a) El bautismo, prometido a los apóstoles y dado también a Cornelio y su familia, (b) los dones milagrosos dados a los que recibieron la imposición de las manos de los apóstoles (Hechos 8:18), (c) la morada del Espíritu en cada cristiano (Hechos 5:32).
(4) ¿Cómo mora el Espíritu en nosotros? Mora en nosotros a través de Su influencia, la cual proviene de Su espada, la palabra de Dios.